Cumplir los objetivos de neutralidad de la Unión Europea exige multiplicar por seis el despliegue de la energía eólica marina, sobre todo en aguas profundas que requieren eólica marina flotante. Para ello se necesitan sistemas de mantenimiento de estaciones eólicas marinas flotantes económicas, sostenibles y bien sustentadas. En este contexto, el equipo del proyecto TAILWIND, financiado con fondos europeos, hará avanzar las líneas de amarre y los sistemas de anclaje para desbloquear la reducción de costes, los beneficios medioambientales y la diversificación de la cadena de suministro para la ambiciosa expansión de la energía eólica marina. En concreto, utilizará tecnologías de vanguardia, desde pruebas con cuerdas sintéticas hasta experimentos con centrifugadoras geotécnicas. En el horizonte se vislumbran sistemas de mantenimiento de estaciones más pequeños y ligeros y flotadores optimizados, con la evaluación integrada del ciclo de vida de TAILWIND, que cuantifica el impacto económico, social y medioambiental en sentido amplio. En este esfuerzo de colaboración participan doce organizaciones de ocho países europeos que abarcan el mundo académico, la consultoría, la construcción y la fabricación.